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Alegaciones al Proyecto de Estacion de Autobuses en Riberas de Loiola

  • 26-03-2012

Tras varios meses de conversaciones, pero sobre todo de escuchar a unos y otros acerca de las posibilidades de acoger en el barrio la futura estación de autobuses, llega el momento de presentar nuestras conclusiones.

Hoy se cumplen cinco meses desde que en la Asociación comenzamos los trabajos para recabar información sobre los proyectos de estacion de autobuses en el barrio.
En todo este tiempo de reuniones con formaciones políticas, vecinos, instituciones y comerciantes, hemos tenido claro que nosotros no íbamos a decidir la ubicación de la estación. Corren tiempos de calma en Ijentea y los 27 concejales que componen nuestro ayuntamiento están suficientemente descansados para tomar la mejor decisión para la ciudad.
Nuestra misión era conocer en profundidad los proyectos, analizarlos, y contrastarlos con la fotografía del barrio que los riberatarras desean tener dentro de diez o veinte años.
No hemos dejado de lado que también somos vecinos de Donostia, y por lo tanto tenemos la responsabilidad de conseguir la mejor ubicación para la estación. Tampoco podemos obviar que su ubicación en Riberas supondría un decisivo impulso para el asentamiento definitivo del barrio en el entramado de la ciudad y para el desarrollo de su comercio.
A pesar de que nos hemos movido sin demasiado ruido, el número de horas que le hemos dedicado a este tema no ha sido pequeño. Tras hablar largamente con unos y con otros, llegamos a la conclusión de que la estación no es buena ni mala para Riberas, aunque sí pueden serlo su diseño, accesos y los problemas de inseguridad que nos puede acarrear. Vimos que, con el oportuno esfuerzo que redujera las consecuencias negativas que conllevan este tipo de infraestructuras, la estación no iba a poner en peligro nuestra calidad de vida.
Lamentablemente, casi ninguno de los problemas que más preocupan a los vecinos han encontrado solución alguna entre las páginas del proyecto definitivo. Por encima de la oportunidad que puede suponer esta instalación para Riberas, se impone el convencimiento de que no se está por la labor de hacer las cosas con el mínimo perjuicio para el barrio. Que con el agravante de las dudas sobre el cierre de Carlos I, percibimos que le quitamos un problema a la ciudad y a cambio ella solo nos devuelve más sombras en forma de tráfico, ruido y contaminación acústica y ambiental.
Riberas ya es un barrio con el aparcamiento saturado, rodeado de demasiadas carreteras y viales de alta densidad y los accesos a la estación bajo el jardín de la memoria lo complicarían aún mucho más.

Por todo ello nos vemos obligados a presentar las siguientes alegaciones:

Alegaciones estación autobuses

En espera de la resolución definitiva de la ubicación os animamos a mostrar vuestras propuestas a través del apartado de Sugerencias de la web municipal www.donostia.org